Los caminos del Señor y las estrategias políticas en campaña son inescrutables. Pensamos que ya lo hemos visto todo; es justo creerlo, ya que en España hemos ido a votar cuatro veces desde 2015, lo que hace suponer que ya nada puede sorprendernos. Sobre todo teniendo en cuenta lo que nos gusta en este país es el esperpento político: quien pueda sacarse de la retina a Cristina Cifuentes dimitiendo por unas cremas de Eroski, que tire la primera piedra y nos diga cómo lo ha conseguido. Ha habido de todo: relaxing cups of café con leche in Plaza Mayor; besos en la boca entre Íñigo Errejón y Manuela Carmena; vídeos de Pedro Sánchez donde se comía la rama de un árbol; el «manda huevos» de Trillo o la justa de rimas y leyendas entre Aitor Esteban y Mariano Rajoy. Decía Esteban en el Congreso: «Si bien me quieres, Mariano, da menos leña y más grano», a lo que el aludido respondía «Si quieres grano, Aitor, te dejo mi tractor». Ya sea dentro o fuera de campaña electoral, la visión que tenemos de nuestros políticos parece a veces más fiel a un sketch de Homozapping que a la seriedad de figuras que deben – o no – representarnos.

Y cuando pensábamos que las frases célebres de Mariano Rajoy llenarían los zappings de mejores momentos televisivos de futuros programas de Nochevieja por sí solitas, llega otro político que, en su intento por dramatizar el discurso y enternecer al posible votante, hace explotar la burbuja. Albert Rivera publicaba en su cuenta oficial de Instagram un vídeo sosteniendo a un cachorrito llamado Lucas, lo abrazaba, lo olía y afirmaba que «aún huele a leche». En campaña. A pocos días de las elecciones.

Como cabía esperar – aunque no quizás con los efectos deseados por sus consejeros de comunicación – las redes ardían en cuestión de segundos. Y es que parecer una parodia de ti mismo nunca le ha funcionado peor a nadie. En una de sus siguientes apariciones mediáticas de campaña, el Debate del 4 de noviembre, Rivera culminaba el show sacando un adoquín como ejemplo de la violencia desatada en las calles de Barcelona. Y así cerraba un círculo de memes que se inició durante su intervención en el debate de abril: el de llevar tantos trastos que los twitteros hablen de su «bolsillo de Doraemon». En fin; Lucas no le salió bien a Rivera, que presentaba su dimisión un día después de las elecciones. Veremos a ver qué depara el futuro.

Pedro Sánchez colgó este vídeo, de camino a Ferraz tras el Debate a 4 del 14 de junio de 2016. El vídeo se hizo viral en redes tras chocarse Sánchez contra la rama de un árbol.
Ana Botella pronunció su famosa «relaxing cup of café con leche in Plaza Mayor» durante su discurso defendiendo la candidatura de ‘Madrid 2020’.